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RevarteColectiva

Mañanas en la Universidad de Pennsylvania 

RevarteColectiva · December 8, 2023 · Leave a Comment

Por Obed Arango

Click here for English version

Humedad matutina,
y fuego que se encumbra,
En el alto de los olmos que se encienden,
Cuerpos diáfanos, troncos diáfanos,
Palabras translúcidas,
y un caminar pausado en el paseo Locust.

Luz que cruza,
Luz que devela instantes,
Instantes que duran,
Lo que duran los pasos,
lo que dura la vida.
Caminamos juntos al Houston Hall.

En la universidad se entrelaza una historia con polos que no se miran.
El fuego que consume para liberar,
Y el frío que adormece el pensamiento,
Opresión que se apila,
Esclavitud,
Libertad que denuncia,
Piedras que susurran las voces contenidas
En las vibraciones que se suman en el viento otoñal
Y que hacen un coro que recorre las calles de Samson,
Market, Walnut y Locust.
Son cientos de miles de acentos,
De sueños que florecen.

Imagen viva:
La princesa en un botón,
Y todo se hace luz, todo se hace vida.
Todo es encuentro, todo es sueño,
Todo es poesía. Todo es verso.

Otra imagen que es ya eterna,
Son las 7:50 de la mañana.
La maestra parte plaza, ¿quién puede resistir no mirarla?
Todo florece a su paso,
Lo muerto revive, nadie puede contener su voz, ni su mirada.
Su sonrisa es orden, el bajar de sus ojos son deseo cumplido.
No necesita decir nada, su presencia todo lo dice.
Tal es el poder de su pensamiento: lo que nombra, existe.
Su voz es luz: son ramas con hojas que prenden. Su voz es mañana de invierno
Que habla de un nuevo inicio, de un nuevo fuego.

Todo sucede y nada sucede.

Todo significa y nada significa.

Todo es diáfano en esta mañana de otoño.

English Version:

Mornings at the University of Pennsylvania
By Obed Arango

Morning humidity
and rising fire,
At the top of the elm trees that light up,
Diaphanous bodies, diaphanous trunks,
Translucent words,
And a leisurely walk on the Locust walk.

Light that crosses,
Light that unveils instants,
Moments that last,
As long as the steps last,
The length of life.
We walk together to Houston Hall.

In the university, a story is intertwined with poles that do not look at each other.
The fire that consumes to release,
And the cold that numbs thought,
Oppression that piles up,
Slavery,
Freedom that denounces,
Stones that whisper the voices contained
In the vibrations that add up in the autumnal wind
And that make a chorus that runs through the streets of Samson,
Market, Walnut, and Locust.
They are hundreds of thousands of accents,
Of dreams that bloom.

Living image:
The princess on a button,
And everything becomes light, everything becomes life.
All is encounter, all is dream,
All is poetry. All is verse.

Another image that is already eternal,
It’s 7:50 in the morning
The teacher leaves the square, who can resist not to look at her?
Everything blooms in her path,
The dead come back to life, no one can contain her voice, nor her gaze.
Her smile is order, the lowering of her eyes are desires fulfilled.
She doesn’t need to say anything, her presence says it all.
Such is the power of her thought: what she names, exists.
Her voice is light: they are branches with leaves that light up. Her voice is a winter morning
That speaks of a new beginning, of a new fire.

Everything happens and nothing happens.

Everything means and nothing means.

Everything is diaphanous in this autumn morning.

Santa Rosa – Lima

RevarteColectiva · December 7, 2023 · Leave a Comment

Por Obed Arango

Click here for English Version

Cuatro rutas, tres camiones y una moto taxi.

Metropolitano, alimentadero, ciudad hambrienta,

Hombres hambrientos, mujeres hambrientas,
Niños hambrientos,
Ciudad hambrienta, siempre rugiendo,
Centralismo que todo lo debora,
Centralismo de diez, cien, y mil cabezas,

Virreinato de Lima y Miraflores que no termina de irse,
El sistema de castas, criollos, indígenas, mulatos, mestizos,
Centralismo que segrega.

Fuerza centrífuga que todo lo transforma,
Que todo atrae, que todo lo absorbe, que todo lo mezcla,
Que escribe una historia confusa e ilegible.

En la tarde en el pituco distrito de Miraflores
El metropolitano se llena,
Filas interminables,
Silencio que se pierde en los celulares,
Son los trabajadores que cabecean en las ventanas,
Que se golpean la frente,
Que caen rendidos ante el día,
Una hora de viaje.

Al bajar en el Naranjal, pasillos interminables
Marcados por rejas y barrotes, y más de cien letreros,
— “Busco Puente Piedra”, pregunto.
— “Allá”, el joven apurado me contesta.

Dos líneas,
Una para ir parado,
Otra para ir sentado,
Un pequeño privilegio
Para quien desea esperar en la fila un poco más.
Inescapable:
Otra hora de viaje.

De pie en esa ballena amarilla, veo las colinas
Llenas de luces, son las montañas donde habita
El inmigrante quechua,
Ahí han hecho sus terrazas, de pie miro por la ventana,
Observo desde un autobús que revienta,
No hay espacio para nadie más,
Es invierno, y los pasajeros visten suéteres y chamarras,
Yo voy a manga corta con playera negra
Y cámara al hombro,
Gorro en la cabeza.

Al descender —humita, canchita, chicha morada—, canciones
Que se crean de la nada y del todo, del caos,
Todos caminan, al norte, al sur, al este y al oeste,
Hay quienes levitan en los olores y canciones,
Todos venden a todos, todos se miran a todos,
Oscura está la calle, subo el puente y veo ese camino largo
Es la Panamericana que cruza el continente,
Que se extiende y se pierde en las montañas,
Que conecta el alma que nos vacía y que nos llena,
Ha caído la noche,
Hay una moto taxi que espera ser abordada.

Estoy rendido,
— “¿Conoce el Quijote en Santa Rosa?” Él responde:
— “Sí”.
— “Para allá voy”.
— “Súbase, ¿de dónde es, caballero?”
Y sentado, exhausto, le respondo,
— “De aquí y de todas partes”.
Me mira sin decir ya más,
Y esboza una sonrisa.

English Version:

Santa Rosa-Lima
By Obed Arango

Four routes, three trucks, and a motorcycle cab,
Metropolitan, feeding a hungry city:
Hungry men, hungry women,
Hungry children.
Hungry city, always roaring,
All-devouring centralism—
Centralism of ten, a hundred, a thousand heads.

Viceroyalty of Lima and Miraflores that does not end up leaving,
The caste system: Creoles, Indians, mulattos, mestizos—
Centralism that segregates.
Centrifugal force that transforms everything,
Attracts everything, absorbs everything, mixes everything,
Writes a confusing, illegible history.

In the afternoon, in the pitiful district of Miraflores,
The metropolitan is full.
Endless lines,
Silence lost in cell phones.
Workers nod in the windows,
Slap their foreheads,
Fall surrendered to the day,
An hour’s journey.

As we get off at the Naranjal, endless corridors
Marked by bars, bars, and more than a hundred signs.
“I’m looking for Puente Piedra,” I ask.
“There,” the young man answers in a hurry.
Two lines:
One for standing,
Another for seated—
A small privilege
For those who wait a bit longer.
Inescapable:
Another hour’s ride.

Standing on that yellow whale, I see the hills
Full of lights; they are the mountains where dwells
The Quechua immigrant.
There, they have made their terraces. Standing, I look out the window,
Watch from a bursting bus,
No room for anyone else.
It’s winter, passengers in sweaters and jackets,
I’m in short sleeves, black T-shirt,
Camera on shoulder,
Hat on head.

As we descend—humita, canchita, chicha morada—, songs
Born of nothing and everything, of chaos.
All walk north, south, east, west.
Some levitate in smells and songs;
Everyone sells to everyone, everyone looks at everyone.
Dark is the street. I go up the bridge and see that long road:
The Panamericana, crossing the continent,
Extending, lost in the mountains,
Connecting the soul that empties and fills us.
Night has fallen.
A motorcycle cab waits to be boarded.
I am surrendered.
“Do you know the Quixote in Santa Rosa?”
He answers:
“Yes.”
“That’s where I’m going.”
“Get on, where are you from, gentleman?”
And sitting up, exhausted, I answer him,
“From here and everywhere.”
He looks at me, says nothing more,
And smiles.

Berenice, La Danzante Azteca

RevarteColectiva · October 3, 2023 · Leave a Comment

Leticia Roa Nixon

Berenice vio a los danzantes aztecas de Filadelfia y supo que quería danzar igual que ellos. Le pidió a su papá, Tomás, que la llevara a las prácticas después de clases. Su padre, aunque llegaba cansado del trabajo de construcción, complacía a su única hija.

Berenice era la única niña en el grupo Fuego Nuevo y la más joven pues tenía ocho años. Pronto aprendió las danzas tradicionales: Fuego, Paloma, Venado, Mayahuel y Tonantzin. Tras varios meses sus padres al ver su dedicación decidieron darle una sorpresa. Pidieron su atuendo de danzante a sus parientes de México quienes viven cerca de las Pirámides de Teotihuacan.
Su tía Luz escogió un lindo traje de tela metálica color rosa mexicano y vistosos adornos de lentejuelas y su tocado de plumas llamado copilli.

En Filadelfia, su madre Marina le ayudaba a trenzar su cabello y ponerse el copilli y que luciera cada prenda del atuendo.

Pasó el tiempo y su padre formó su propio grupo de danza llamado Tonantzin Coatlicue que significa Madre Tierra.
Su padre tocaba el huehuetl, el tambor abuelo y su primo David soplaba su caracol, el atecocolli.

Su mamá Marina y su abuela Cruz eran las sahumadoras. Se encargaban de mantener el sahumerio encendido desde que se iniciaba la danza hasta que terminaba quemando incienso de copal sobre pedacitos de carbón dentro del sahumerio.

En la danza azteca, las sahumadoras saludan a las seis direcciones, norte, sur, este, oeste, hacia el cielo y hacia la tierra. Son acompañadas por el sonido del huehuetl y el atecocolli. Los danzantes tocan sus sonajas, los ayacaxtlis, mientras se saluda a las cuatro direcciones, al sol y a la tierra.
Después se forma el círculo de danzantes y en el centro está el huehuetero y el sahumerio.

Luego cada uno de los danzantes pasa frente al huehuetl pide permiso y ofrece su danza. Berenice escuchó al huehuetl tocar y dijo suavemente:
Ta-tan Ta-Tan
Tatatán –Tan
Ta-tan Ta-Tan
Tatatán – Tan
Tatatata tata tan
Tatatata tata tata tan

El toquido del huehuetero indica a los danzantes que ya comenzará la danza solicitada. Berenice ha aprendido que los pasos de la danza representan a la naturaleza. Las vueltas y giros representan la fertilidad y otras combinaciones representan la tierra y las cosechas. Girando en el aire representa el alma. Los brincos sobre el mismo sitio, al fuego, mientras que los pasos en zig zag simbolizan el agua.

¡Zin Zin! suenan las coyoleras atadas alrededor de sus tobillos.
¡Whoosh Whoosh! zumba el aire cuando Berenice da sus giros.
Con cada paso, zin zin, las coyoleras imitando el sonido de la serpiente, suenan alrededor de sus tobillos. Berenice siente como vibra la tierra bajo sus pies descalzos.

Al terminar esta danza, recibe del regidor de las danzas el bastón que debe llevar para pasar al frente del huehuetl para ofrendar su danza que es Águila Blanca.
En cada parte de su danza, Berenice siente que vuela al igual que el ave, elevándose por encima del círculo de los danzantes.
Con cada giro siente cada vez más que vuela tan alto como si pudiera alcanzar las nubes y los astros.

Siente el viento acariciar su rostro y el aleteo de las alas poderosas del águila.
Y en eso escucha en su oído las palabras del Jefe Antonio:
“La danza de conquista azteca es una danza para los cuatro colores de las razas-madre, la roja, la negra, la blanca y la amarilla; para los cuatro vientos y las cuatro direcciones. Quien danza hacia las cuatro direcciones templa su espíritu y llega hasta su propio centro. Y, al centrarse, centra todo el universo.”

Poco después alcanza lograr escuchar de nuevo el sonido del huehuetl indicando que su está llegando a su fin.
Berenice siente que como si su cuerpo fuera aterrizando lentamente para encontrarse otra vez en el círculo de los danzantes.

Frente al huehuetl traza los pasos que indican que ha terminado su danza y luego corre dentro del círculo con el bastón para entregarlo al regidor.
Ocupa de nuevo su lugar y siente de nuevo vibrar la tierra cuando todos los danzantes comienzan a seguir los pasos de la siguiente danza.
“Ah, es Mayahuel”, piensa para sí y pronto se deja llevar por el vaivén pausado de esa danza.

Cuando todos los danzantes han ofrendado su baile, las sahumadoras recogen sus sahumerios que estaban frente al huehuetl, su primo David toma su atecocolli y los danzantes suenan sus ayacaxtlis. Es tiempo de agradecer y despedir a las seis direcciones, oriente, poniente, norte y sur, al sol Tonatiuh y a la tierra Tonantzin

Después los danzantes que siguen en el círculo comparten sus sentimientos.
Toca el turno a Berenice : “Con el permiso del Creador y de los danzantes aquí presentes doy gracias por estas danzas que han alegrado mi corazón”.

Luego es tiempo de cambiarse el atuendo y platicar con los demás mientras se comparte fruta, agua, atole y comida.
Berenice, la danzante azteca, se siente feliz de ser parte de la gran familia que conserva esta tradición del México prehispánico.

Leticia Roa Nixon

Leticia Nixon, nacida en la Ciudad de México, cursó la carrera de comunicación en la Universidad Iberoamericana. Desde 1992 se dedica al periodismo comunitario de Filadelfia. Es autora de seis libros y video productora de PhillyCAM. Escribe para philatinos.com y reside en Swarthmore, Pa.

    POEMAS DEL ÉTER y LA TRAVESÍA DEL GAP EN BICICLETA

    RevarteColectiva · October 3, 2023 · Leave a Comment

    MARILU VILLANUEVA

    AVATAR DEL ÉTER

    Persiguiendo mi propio recuerdo imposible

    Me aventuré hacia el bosque alto

    Perdiéndome entre los senderos.

    Subiendo hacia la montaña del ángel azul

    Desde el cielo te vi descender.

    Flotabas cortando el viento a gran velocidad

    Y te posaste derrapando sobre la tierra

    Montado en dos ruedas encendidas.

    La más increíble aparición

    Entre nubes de polvo

    Y fuego en los pedales.

    Cruzando como una ráfaga imparable

    Me reconocí en ti.

    Y se mezcló tu fuego con el agua de mis ojos.

    Peligrosamente hermoso

    Descaradamente bello

    Travieso saltabas sobre las rocas

    Y el eco multiplicaba tu risa entre los árboles.

    Mágico Avatar del Éter

    Maestro de los cuatro elementos

    Rueda veloz rodeando la montaña

    Llevándote las sombras de lo imposible.

    Muéstrame la Libertad en el reflejo de tu mirada

    Exhala sobre mi rostro tu encanto de fuego

    Posando tus labios en un beso eterno.

    Rodéame con tus alas

    Y enséñame a volar hacia el firmamento.

    Semidiós alado multicolor

    Que dominas todos los terrenos

    Llévame lejos a gran velocidad

    Con la fuerza de tu embrujo

    Hacia la Total Libertad.

    Producciones del Quinto Elemento.

    MARILÚ VILLANUEVA.

    AVATAR DEL ÉTER

    EL GAP ENTRE LOS NIÑOS DEL ENDURO

    Desde la cima del Monte Tam

    Descendemos con furia lúdica

    Atacando los cortafuegos

    Y sorteando las piedras.

    El elástico espacio entre nuestras enduro

    Se mantiene dinámicamente presente.

    Existe magia de tiempo y distancia entre los dos.

    Vas al frente en la persecución

    Subes y bajas tu velocidad

    Y yo ajusto la brecha entre nosotros.

    No deseo alcanzarte

    Me obsesiona el intervalo que nos separa

    Quiero perderme en la tensión del vaivén

    En la aventura de descifrarte.

    Elijo observarte entre saltos

    Acercarme peligrosamente en cada curva.

    Para después alejarme y contemplar

    Tu dominio perfecto de la bicicleta.

    Serpenteando los senderos de lo prohibido

    Bordeando troncos y rocas

    Te respiro secretamente en el viento

    Y sin contacto nos fusionamos en uno.

    Es la permanente posibilidad de sonrisa

    Inherente a este Gap de polvo y Éter

    Sin claridad en las intenciones

    La que mantiene viva la llama en mis pedales.

    Avanzo y me retraigo divertida

    En este resquicio de seducción eterna

    Incendiándome con las chispas de tu mirada

    Y el salvaje suspiro de tus labios suaves.

    Jamás detengas tu vuelo vertiginoso y libre

    Ciclista hermoso con encanto de verano

    Muchacho impetuoso de la montaña

    Niño del Enduro de todo el año.

    Producciones del Quinto Elemento.

    MARILÚ VILLANUEVA.

    EL GAP ENTRE LOS NIÑOS DEL ENDURO

    EL ETERNO GAP DE ÉTER

    ¿Y qué sabes tú de lo que existe en el intersticio entre la inquietud y el más incipiente amor?…

    Es un espacio donde todo y nada sucede, la mente se desprende, los sueños oscilan de un límite a otro.

    El entorno es claro, transparente… no aparece el más fino interés.

    Nada es más abierto y libre… no hay ataduras.

    Las intenciones tácitas son… ni siquiera tu voz o mi voz sabrían pronunciarlas: porque no las conocen.

    No hay una meta o un camino a seguir. Puedo avanzar, regresar… detenerme o perderme en el vaivén.

    Puedo rozarte con mis letras… y tú acariciarme con tus ojos.

    Puedo besar tu sonrisa… y percibir inocencia.

    Soy completo cuando estoy contigo, porque soy yo mismo…

    Tan completo… que generoso disfruto compartiendo un fragmento de felicidad.

    Me gusta escucharte, sentirte y saberte cerca.

    No soy culpable si continúo trazando líneas.

    Aunque mi mano proyecte una sombra de amor sobre el papel… 

    Son dimensiones separadas.

    Las divide este abismo de emociones: del que, a intervalos, no quisiera salir.

    Puedo llegar tan alto como mi imaginación permita o descender hacia donde todo está latente… y fingir no recordar.

    El mundo da vueltas… yo giro, salto, me elevo o desciendo… oscilo en sueños, avanzo y regreso… me pierdo en el tiempo.

    Mi corazón se sobresalta… y me acerco feliz a la locura de descubrirte.

    Dulcemente… no es amor

    Pero dime, entonces:

    ¿Qué sabes tú de lo que existe en este… nuestro eterno Gap de Éter?

    En el eterno intersticio entre nosotros.

    Producciones del Quinto Elemento.

    MARILÚ VILLANUEVA.

    EL ETERNO GAP DE ÉTER

    LA INSPIRACIÓN LLEVA TU NOMBRE

    El poeta escogió como alimento: la inspiración.

    Quién diría que la inspiración tendría nombre de varón y el encanto de la bicicleta. 

    Traduciendo fuerza en delicadas emociones y energía en endebles movimientos.

    Ahora pareces inaccesible… y por lo mismo: fascinante.

    ¿Qué tan prohibido será que viajes por los senderos de mi mente?

    Avanzando despacio, con un pausado y ligero rodar que te conduzca… sin conciencia aparente… hacia oníricos destinos. 

    Dejándote llevar en la dirección de un viento que murmulla cómo mi corazón canta… tus pedales, al unísono de mis latidos.

    Será un paseo suave… callado… entre las nubes del Éter… con la tranquilidad de quien respira sueños de tenues matices.

    Un silencio casi absoluto rodeará tu figura, para que escuches el musical acento de tu suspiro inquieto.

    Cierra tus ojos… tan sólo piensa en ti… percibirás como puedo tocarte intensamente con la mirada:

    Dibujando así… silentes caricias sobre tu piel; que resbalarán en grácil descenso, una a una, cubriendo tu ser.

    De mis labios escapará un beso tibio, bañándote con la inocencia frágil de quien desea pensarte hasta la devoción.

    No existe en mí el tiempo, mas permíteme crearte a cada instante.

    Experimenta cómo sólo queda de ti lo que de mi queda: sólo existo a través de ti, que no existes en absoluto, puesto que sólo existes a través de mí.

    Escondido en lo que el poeta llama inspiración.

    Porque la inspiración… lleva tu nombre.

    Producciones del Quinto Elemento.

    MARILÚ VILLANUEVA.

    LA INSPIRACIÓN LLEVA TU NOMBRE

    Glosario

    * El Enduro: Es un Downhill con bicis más técnicas

    * El Monte Tam en California es el Origen del: Mountain Bike

    * La Montaña del Ángel Azul: Es el Cerro de San Miguel en el Desierto de los Leones

    MARILU VILLANUEVA

    Maestra en Letras Iberoamericanas.
    Terapeuta Alternativa Experta en Técnicas Meditativas
    Amante del Zen, la Montaña y la Bicicleta. Mexicana

      Letter from the Editor

      RevarteColectiva · September 15, 2023 · Leave a Comment

      VOLUME 1, ISSUE I

      Las diversas formas
      de vivir la democracia

      CARTA DEL EDITOR

      Durante las últimas décadas hemos pensado que la democracia se reduce a la elección libre de los representantes y de las autoridades. Si bien, este ejercicio es esencial de los estados democráticos, reducir la práctica de la democracia a tan solo este acto, termina por ser una píldora adormecedora de la sociedad civil. 

      La democracia puede ser un estilo de vida de las comunidades, de las familias, de los individuos, de los sistemas sociales y que va más allá de elegir, sino que se convierte en voces y actos que se suman, transforman, y que abren nuevas directrices y que con arte nos abren el universo y muchos mundos. Quizá esto que comparto podría parecer utópico, pero cuando en REVARTE nos propusimos formar este número, con esperanza nos dimos cuenta de que muchas comunidades alrededor del mundo practican la democracia desde sus propias maneras, y que además su poder transformador se transfiere a esferas mayores.

      Con lo anterior no deseamos echar campanas al vuelo e ignorar que el surgimiento de nuevos autoritarismos, y formas emergentes del fascismo – esas nuevas formas de totalitarismo nacionalista, como por ejemplo el movimiento Make America Great Again de Donald Trump–  ponen en peligro, no solo a las democracias representativas, sino también a aquellas que la practican de manera comunitaria. A esto se le suma la amenaza silenciosa y camuflajeada de democracia como lo es el neoliberalismo. Nada más peligroso que este último, porque es precisamente el neoliberalismo que entierra las decisiones cotidianas y empodera a las grandes corporaciones como factores determinantes de las grandes decisiones del mundo. Así, son las corporaciones que explotan los  recursos naturales, que comercializan hasta la existencia misma, es decir lo vital: el aire, el agua, la tierra, la educación, la salud, la vivienda, las comunicaciones, la naturaleza etc. La voz y los intereses de las corporaciones hoy en día tienen mayor peso en el diseño de legislaciones que las voces de los ciudadanos. 

      Y aun, en medio de este panorama en el que parece que no queda un espacio en este mundo que no esté asfixiado por una marca, hay comunidades que se rebelan, que resisten, que retan, que cuestionan, que suman, que crean y recrean caminos. 

      Este número recorre el continente, y presenta ejemplos y reflexiones que van desde lo local en el área de Filadelfia, hasta lo continental, y que suman las voces y experiencias en México, y Perú. Así nos enteramos de quienes se expresan y denuncian de manera valiente los abusos en el Perú y en América Latina (El Quijote Radio),  la formación de las cooperativas hechas por inmigrantes (Leti Roa Nixon) en la ciudad de Filadelfia, las voluntades y pensamientos que por años buscan la transformación del sistema educativo a través de la investigación comunitaria y participativa (el Centro de Investigaciones Participativas de CCATE) y la relevancia de la visualización de datos para el diseño y acción de movimientos sociales (Erika Cortés), la reflexión y el contraste entre gobierno y comunidad así como el derecho a la información (Emma Hertz), la propuesta y la creación de una vivienda digna no solo para quien la habita sino para el mundo mismo (Aura Cruz).

      La niñez reflexiona a través del artículo de Pam Margolis quien es maestra de la clase “Encuentra tu voz”, ella nos comparte de la experiencia en cómo las y los niños de CCATE crean espacios de diálogo y democráticos, y como llevan esa voz a la propuesta artística y narrativa a través de libros hechos de cartón.

      La juventud también se expresa en este número, y reflexiona sobre la crisis de refugiados e inmigrantes, así como de un sistema disfuncional que por décadas no ha querido revisarse (Sara Sandoval Rico), la reflexión musical, artística, honesta, cruda y personal del joven inmigrante como ls hace el cantante de Rap Bvmf Andy y su equipo de producción, y la palabra sensible y profunda de quien como niña ha observado a sus padres trabajar y luchar como inmigrantes y que son impulso de sus sueños personales para ir a la universidad (Jovana), y el retrato hablado de Jenny Berrios que la clase de cine de CCATE y sus mentores David Villalvazo y Obed Arango presentan acerca de una talentosa artista visual emergente que compartió sus años universitarios con la comunidad de CCATE y que ahora vive en Dallas y trabaja para el museo de arte de la misma ciudad, y reflexiona sobre su identidad como mujer latina, salvadoreña y de familia inmigrante. 

      Finalmente, la palabra libre que se expresa a través del círculo de escritura que comparte los primeros capítulos de cuatro novelas cortas que en cada número levantarán su velo poco a poco (Rosalba, Lourdes, Aura, y Obed), tres poemas que nos llevan a la montaña y una reflexión existencial profunda del amor, y de la esencia de lo que nos hace uno con el universo: 

      “¿Sientes mi corazón latir?

      ¿Sientes lo mismo?” (Marilu Villanueva) 

      Y dos maravillosos cuentos que evocan la mitología maya y mexica en la pluma de la decana del periodismo latinoamericano de la región como lo es Leti Roa Nixon.

      REVARTE en si es una manera de vivir y de practicar la democracia, un contra espacio de resistencia y de creatividad, para crear contra narrativas que recrean la democracia y el mundo. 

      Todo esto nos hace exclamar con esperanza: “¡Viva la comunidad!”


      Letter from the editor.

      During the last decades, we have thought that democracy is reduced to the free election of representatives and authorities. Although this exercise is essential for democratic states, reducing the practice of democracy to just this act ends up being a sleeping pill for civil society.

      Democracy can be a lifestyle of communities, families, individuals, and social systems that goes beyond choosing, but rather becomes voices and actions that add up, transform, and open up new guidelines and, with art, open the universe and many worlds to us. Perhaps what I share might seem utopian, but when we at REVARTE set out to create this issue we realized, with hope, that many communities around the world practice democracy in their own ways, and that its transformational power is transferred to larger spheres.

      That being said, we do not want to ignore that the rise of new authoritarianisms and emerging forms of fascism – these new forms of nationalist totalitarianism, such as Donald Trump’s Make America Great Again movement – ​​endanger not only representative democracies, but also those who practice it in a communal way. Added to this is the silent and camouflaged threat of democracy of neoliberalism. Nothing is more dangerous than the latter, because it is precisely neoliberalism that buries everyday decisions and empowers large corporations as determining factors in the world’s great decisions. Thus, they are the corporations that exploit natural resources, that commercialize even existence itself, that is, what is vital: air, water, land, education, health, housing, communications, nature, etc. The voice and interests of corporations today have greater weight in the design of legislation than the voices of citizens.

      And even in the midst of this panorama, in which it seems that there is no space left in this world that is not suffocated by a brand, there are communities that rebel, resist, challenge, question, add, create, and recreate roads.

      This number covers the continent, and presents examples and reflections that span from the local Philadelphia area, to the continental, and that add the voices and experiences in Mexico and Peru. Likewise, we listened directly to the federal congresswoman from the fourth district of Pennsylvania, Madeline Dean, on the formation of cooperatives made by immigrants (Leti Roa Nixon), the dreams and thoughts that for years have sought the transformation of the educational system through research community and participatory (CCATE’s Center for Participatory Research), the relevance of data visualization for the design and action of social movements (Erika Cortés), reflection and contrast between government and community as well as the right to information (Emma Hertz), the proposal and creation of decent housing not only for those who inhabit it but for the world itself (Aura Cruz), and the courageous voice of those who express themselves and denounce the abuses in Peru and Latin America (El Quixote Radio).

      Children reflect through the article by Pam Margolis, who is a teacher of the “Finding your voice” class at CCATE. She shares her experience with how the children of CCATE create spaces for dialogue and democracy, and how they bring that voice to the public through artistic and narrative proposal.

      Youth is also expressed in this number, and reflects on the refugee and immigrant crisis, as well as a dysfunctional system that for decades has not wanted to be revised (Sara Sandoval Rico), the musical, artistic, honest, raw and personal reflection of the young immigrant as the rap singer Bvmf Andy and his production team do, and the sensitive and profound words of those who, as a child, have observed their parents work and struggle as immigrants and who are the impulse of their personal dreams to go to university (Jovana Peregrina), and Jenny Berrios’ spoken portrait presented by the CCATE Film Class and their mentors David Villalvazo and Obed Arango about a talented emerging visual artist who shared her college years with the CCATE community and now lives in Dallas and works for the art museum of the same city, and reflects on her identity as a Latina, Salvadoran woman, and from an immigrant family.

      Finally, the free word that is expressed through the writing circle that shares the first chapters of four short novels that will gradually lift their veil in each issue (Rosalba, Lourdes, Aura, and Obed), three poems that lead us to the mountain and a deep existential reflection on love, and the essence of what makes us one with the universe:

      “Do you feel my heart beat?

      Do you feel the same?” (Marilu Villanueva)

      And two wonderful stories that evoke Mayan and Mexica mythology from the pen of the dean of Latin American journalism in the region, Leti Roa Nixon.

      REVARTE itself is a way of living and practicing democracy, a counter space for resistance and creativity, to create counter narratives that recreate democracy and the world.

      All of this makes us exclaim with hope: “Long live the community!”

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