por Obed Arango, Guadalupe Castillo, Horacio de la Luz, Lourdes Flores, Salomé Flores, Holly Link, Diana Lugo, y Laura Sánchez
Este ensayo nace desde una pregunta clave que invita a retar los modelos establecidos de la educación en el que el conocimiento es unidireccional, y en el que se construye muchas veces desde las academias. En este artículo compartiremos cómo hemos vivido un diálogo fecundo, democrático, y a través de los años, y en el que las reflexiones en conjunto, y la investigación comunitaria nos da una luz distinta, varias perspectivas que desde la academia no se hubieran podido vislumbrar. En las siguientes líneas, daremos respuesta a la pregunta inicial, a partir del proceso que llevamos y bajo la metáfora de labrar juntos la tierra del conocimiento desde la misma base social.
Recientemente en CCATE empezamos una nueva colaboración con el Centro de Estudios Latinoamericanos y Latinx, y la Escuela de Educación, de la Universidad de Pensilvania (Penn). Nuestra meta es desarrollar lo que se llama una asociación de práctica de investigación (API), en la cual se forma una alianza a largo plazo entre investigadores universitarios y comunitarios para dar respuestas a los retos y obstáculos que hay en el campo y práctica de la educación.
Para formar esta alianza es necesario dar algunos pasos que permita construir puentes de comunicación entre la universidad y la comunidad. El primer paso que se decidió en conjunto es él de reunirnos mensualmente para sostener diálogos comunitarios, de esta manera podemos conocernos, apreciarnos, reconocer el conocimiento y el aporte de todxs, y asimismo, compartir y explorar nuestros intereses en común y la agenda social de la comunidad. Hemos dialogado de manera abierta, y honesta, sobre la desigualdad en el sistema educativo y en relación con la comunidad latina. En el tercer diálogo en noviembre, nuestro círculo de investigaciones comunitarias participativas de CCATE compartió sobre el trabajo que hemos hecho juntxs desde 2015, nuestras experiencias como investigadores comunitarios y también compartimos sobre nuestro nuevo proyecto. Lo siguiente es un resumen de lo que compartimos.
Nuestra labranza:
Empezamos a trabajar en el 2015 cuando un grupo de familias y líderes de CCATE se juntaron para dar una presentación en el Foro de etnografía en educación de Penn – GSE). La meta fue dar la perspectiva familiar de madres, padres e hijxs méxicanxs sobre la comunicación entre familias y escuelas, sobre asuntos de estatus migratorio, un tema visto en esa época como tabú para maestrxs y administradores escolares, un tabú que sigue existiendo hoy en día, incluso para las familias en si. Después de la presentación los que participamos escribimos un artículo titulado Un trago dulce pero con sabor amargo sobre la experiencia que fue publicada en 2016 en la Revista de Educación de la diáspora, los indígenas y las minorías. En ello teorizamos cómo, a través de una colaboración crítica motivada por nuestra presentación conjunta, co-construimos contraespacios en los que, mientras cuestionamos lo que tendemos a considerar como conocimiento y experiencia en la investigación educativa, es decir hicimos cuestionamientos epistemológicos y ontológicos importantes en los que concluimos que el conocimiento se produce también desde la comunidad y no solo desde la academia, a esto le llamamos la democratización del conocimiento. Pudimos abordar no solo la dificultad de comunicarnos con los docentes sobre temas relacionados con estado de documentación, sino también de saber abordar este tema con lxs niñxs y entre ellxs. Vemos este trabajo juntxs como una labranza de la tierra en preparación para la formación de lo que actualmente es nuestro Círculo de investigaciones comunitarias participativas (CIPC).
La siembra: El entrenamiento y desarrollo del CIPC
Dos mil dieciocho marca el año que esparcimos semillas para una nueva fase de nuestro trabajo en conjunto cuando empezamos a vernos cada semana. Nos entrenamos en métodos de investigaciones participativas y desarrollamos nuestra primera investigación. Este tipo de investigación se centra en las inequidades ambientales, sociales, estructurales y físicas y requiere participación activa de los miembros de la comunidad en todos los aspectos del proceso de investigación. Los resultados se utilizan para desarrollar acciones concretas para abordar estas desigualdades (Mora & Diaz, 2004). Desde entonces hemos tenido más de 180 reuniones semanales durante las cuales hemos abordado temas sobre la educación y la migración, los efectos del estatus migratorio en las experiencias escolares de estudiantes de familias de estatus mixto, y comunicación entre el hogar y la escuela sobre estos asuntos. Nuestras investigaciones acerca de estos temas están profundamente arraigadas en la noción de Paulo Freire de la educación dialógica junto con la filosofía de CCATE de que todxs tienen algo que enseñar y algo que aprender. En contraste con el modelo bancario, la educación dialógica coloca significantes y el diálogo crítico como base para la enseñanza y el aprendizaje.
Cosechando: Los resultados del trabajo de CIPC
Hemos experimentado y visto una rica cosecha del trabajo que hemos hecho juntxs desde el 2018. A nivel individual y colectivo los resultados han sido aprender, leer, superarnos en nuestra educación, y conocernos y querernos como grupo. Hemos experimentado el proceso de concientización de la cual habla Paulo Freire. Hemos podido trabajar y dialogar acerca de la complejidad de las realidades de nuestra comunidad y de cómo funciona la educación bancaria y cómo está funcionando en las escuelas. Otro resultado ha sido el proceso de autoayuda. Por ejemplo, ahora la comunidad tenemos más valor y confianza de hablar con las escuelas. Incluso hemos podido proveer servicios para nuestra comunidad, por ejemplo, creando una guía de preguntas para usar en las conferencias escolares. También nos hemos fortalecido en la abogacía y organización comunitaria.
Hemos logrado varias publicaciones y muchas presentaciones que nos han traído promoción de nuestra labor y colaboración, principalmente con universidades. En el proceso se ha abierto diálogo con personas que no habíamos considerado y hemos podido entablar diálogo con colaboradores nuevos. Por ejemplo, ahora tenemos una relación con miembros de la junta directiva de Distrito Escolar de Norristown. Incluso por este lado hemos sido invitadxs a ser parte de un comité comunitario consejero para el distrito escolar. Y por estas conexiones, el año pasado logramos ser contratadxs como consultores para los enlaces comunitarios del distrito escolar quienes proveen servicios de interpretación para familias de habla español. Durante esta experiencia que fue un trabajo de cuatro estaciones durante el año escolar, pudimos trabajar y dialogar acerca de la complejidad y la realidad de cómo funciona la educación bancaria en las escuelas de Norristown, y cómo está funcionando en las escuelas, y en nuestra propia educación incluso con personal hispano en el distrito. Esta experiencia nos mostró los efectos de la colonización mental que han experimentado muchos miembros de la comunidad migrante y latina, por ejemplo, las ideologías que llevan como el “mandato” de usar solo inglés en las escuelas. Trabajar con el distrito escolar también nos ha motivado a involucrarnos más en asuntos de las escuelas y de regresar a dar clases de español para maestrxs y miembros de la junta de concejales de la municipalidad.
Finalmente nuestro trabajo ha motivado que en otros círculos de CCATE se haya generado investigaciones y presentaciones, por ejemplo en justicia ambiental y salud, con las Artivistas, un colectivo de arte en crecimiento que crea un espacio para que las mujeres expresen su creatividad, reflexionen sobre sus identidades y exploren problemas sociales apremiantes, y con el grupo de investigaciones participativas de jóvenes. Estos proyectos han incluido estudios, colaboraciones con otras universidades y organizaciones sobre el plomo, el rol de la mujer en la sociedad, un censo de salud para nuestra comunidad y la ejecución de clínicas de salud y vacunación. De esta manera, nuestro trabajo tiene impacto circular que implica el compromiso y conocimiento de diversos grupos en CCATE.
Piedras en el camino: Los retos que enfrentamos
En el camino hemos enfrentado una variedad de retos. Por ejemplo, aunque nos reunimos cada semana por varias horas nunca tenemos tiempo suficiente para hacer todo lo que queremos hacer y lograr. Reconocemos que lo que hacemos es una gran labor para algo que aunque sí tiene resultados positivos en el momento, la transformación social que esperamos no se verá hasta años más adelante. A la vez reconocemos que cada una y uno de nosotrxs tenemos diferentes identidades, roles y posicionalidades que se relacionan con experiencias vividas y niveles de comprensión muy diferentes entre nuestros miembros sobre los temas que investigamos y los problemas sociales que enfrentamos. Mientras vemos estas diferencias como claves en poder desarrollar proyectos que ayudarán a hacer los cambios que esperamos, entendemos que fuera de nuestro grupo las etiquetas y suposiciones sobre quiénes somos y lo que podemos aportar y enseñar pueden ser dañinos, y pueden prohibir que ciertos grupos nos escuchen y nos respeten. Por ejemplo, un reto ha sido la negación de administradores y de empleados, incluso latinxs, del distrito escolar de ver a los miembros de nuestro grupo como expertos, lo cual nos indica el profundo nivel de colonización mental de personas de nuestra propia comunidad. También reconocemos que los temas que investigamos caen como un peso enorme en los miembros de nuestro grupo quienes experimentamos con las inequidades y agresiones contra migrantes, y especialmente migrantes indocumentados. Por eso nos tenemos que cuidar y movernos al ritmo que tenga sentido.
Nuevas labranzas: Nuestro nuevo proyectoEste año hemos empezado un nuevo proyecto de investigación en el que usamos el método de foto voz, un proceso mediante el cual las personas pueden identificar, representar y mejorar su comunidad a través del uso de fotos o imágenes (Wang & Burris, 1997). Las preguntas que nos están guiando son las siguientes: ¿Cómo podemos desenterrar las raíces culturales, históricas y actuales de nuestras comunidades? y ¿De qué hemos sido despojadxs? Nuestra meta es entender mejor los efectos del colonialismo y los procesos de despojo que experimentan migrantes mexicanxs y latinoamericxs en los Estados Unidos. Actualmente, estamos haciendo un estudio piloto de foto voz entre los miembros de nuestro círculo explorando estas preguntas. Basado en lo que aprendemos, esperamos invitar a un grupo de miembros de la comunidad de CCATE – familias, jóvenes y personal del distrito escolar – que participen en una investigación formal. Usaremos estos datos para desarrollar y proponer acciones legislativas concretas para las escuelas y la municipalidad. De esta forma el círculo de investigaciones participativas de CCATE seguirá llevando su labor más allá del conocimiento, y experiencias de la comunidad inmediata, a otros grupos, instituciones y miembros de la comunidad. Lo que vislumbramos es una mayor influencia pública, una concientización y humanización, tanto en los diálogos como en las acciones que son resultado de la influencia del conocimiento que se produce desde y por la comunidad.
Los miembros del CCATE Investigación Acción Participativa
María Guadalupe Castillo – Inmigrante mexicana, investigadora y líder comunitaria, instructora de clases de gimnasia para niños, integrante de los círculos de Artivistas, y de salud del CCATE.
Horacio de la Luz – Inmigrante mexicana, investigador y lider comunitario del CCATE.
María Lourdes Flores – Inmigrante mexicana, investigadora y lider comunitaria, instructora de la clase de dibujo, integrante de los círculos de Artivistas, y de salud del CCATE.
Salomé Flores – Inmigrante mexicana, investigadora y lider comunitaria, integrante de los círculos de Artivistas, y de salud del CCATE
Diana Lugo – Inmigrante mexicana, investigadora y lider comunitaria, instructora de clase de justicia ambiental en CCATE, integrante de los círculos de Artivistas, y de salud del CCATE.
Laura Sánchez – Inmigrante mexicana, investigadora y lider comunitaria, integrante de los círculos de Artivistas, y de salud del CCATE
Holly Link Ph.D. – Director de Programas Educativos e Investigación del CCATE, y profesor de política social en la Escuela de Política y Práctica Social (SP2) de la Universidad de Pensilvania.
Obed Arango – Director Ejecutivo del CCATE y profesor de política social en la Escuela de Política y Práctica Social (SP2) de la Universidad de Pensilvania.
HOW DOES A PARTICIPATORY RESEARCH GROUP OF THE LATINX IMMIGRANT COMMUNITY WORK TOWARDS DEMOCRATIZING KNOWLEDGE FOR SOCIAL TRANSFORMATION?
This essay stems from a key question that challenges established models of education in which knowledge is unidirectional, and in which it is often built top-down from the Academy. In what follows, we share how, through our community-based participatory research at CCATE, we have lived a fruitful, democratic dialogue through our research and work together in which we draw on non-traditional forms of knowledge-making. We use the metaphor of tilling the land of knowledge together from a shared base of love and connection.
Recently at CCATE we started a new collaboration with the Center for Latin American and Latinx Studies, and the Graduate School of Education, both of the University of Pennsylvania (Penn). Our goal is to develop a Research Practice Partnership (RPP), in which a long-term alliance is formed between university and community researchers to provide answers to the challenges and obstacles that exist in the field and practice of education and education research.
To form this alliance, we have been meeting monthly to hold community dialogues among CCATE families, and Penn faculty and students, to get to know each other and recognize everyone’s knowledge and contributions, and also share and explore our common interests in education. We have spoken openly and honestly about inequities in Norristown schools and in relation to the Latinx community. In November, our CCATE participatory community research circle shared about the work we have done together since 2015, our experiences as community researchers, and our new research project. The following is a summary of what we shared.
Tilling the Soil
We started working together in 2015 when a group of families and CCATE leaders came together to give a presentation at the Penn Ethnography in Education Research Forum. The goal was to share family perspectives from Mexican parents and children on communication with schools about issues related immigration status, a topic seen as taboo in schools and one still exists, even for families themselves. After the presentation, those of us who participated wrote an article entitled, A sweet drink but with a bitter taste about our experience presenting at the forum. This was published in 2016 in the Journal of Diaspora, Indigenous and Minority Education. In this article we theorize how, through a critical collaboration motivated by our presentation, we co-constructed counterspaces in which we questioned what we tend to consider as knowledge and experience in educational research, exploring new epistemological (what counts as knowledge) and ontological (who are typically considered to be researchers) questions. We concluded that critical knowledge about education can be produced
from and in the community, which we see as crucial for the democratization of knowledge. In the article, we addressed not only the difficulty of communicating with teachers on issues related to documentation status, but also the difficulty of addressing this issue within and among immigrant families. We see this initial work together as tilling the soil in preparation for the formation of what is now our Community-based Participatory Research Circle (CIPC).
Planting seeds: CIPC training and development
In 2018, we began sowing seeds for a new phase of our work together, meeting weekly as a group. We trained in participatory action research (PAR) methods and developed our first research project. PAR focuses on environmental, social, structural, and physical inequities and involves active participation of community members in all aspects of the research process. The results are used to develop concrete actions to address these inequalities (Mora & Diaz, 2004). Since 2018, we have had 180+ sessions together during which we have explored issues around education and migration, the effects of immigration status on the schooling experiences of students from mixed-status families, and communication between home and school on these issues. Our research on these issues is deeply rooted in Paulo Freire’s notion of dialogic education along with CCATE’s philosophy that everyone has something to teach and something to learn. In contrast to the banking model, dialogical education critical dialogue as the basis for teaching and learning.
The Harvest: Results of Our Work
We have experienced and seen a rich harvest based on the work we have done together since 2018. Individually and collectively the results have been learning, reading, educating ourselves, and getting to know and love each other in our circle. We have gone through the process of conscientization of which Paulo Freire speaks. We have been able to discuss and address the complexity of the realities of our community and how the banking model of education still prevails in Norristown schools. Another result of our work has been developing deep support systems for CCATE families and avenues for them to participate more actively in schools, through, for example, parent guides to use at school conferences. Community members now have more courage and confidence to broach difficult topics with their children’s teachers and school administrators, and we have also strengthened our advocacy and organizing among our community.
Our group has achieved several publications in English and Spanish in education journals, and we have shared our work through many presentations at universities in the US, Mexico, Sweden and Germany. Through these experiences, we have engaged in dialogue with university students, faculty, and local school teachers and administrators. For example, we have formed a partnership with several Norristown School District Board members, and through this partnership have been invited to be part of a community advisory committee for the school district. We have also worked as consultants for the school district’s community liaisons who provide interpretation services for Spanish-speaking families. Through this work were we were able to more clearly engage with and better understand the complexity and reality of how banking education works in Norristown schools, and how this filters down to daily interactions between school personnel and Spanish-speaking families, who for example, tend to be positioned through a deficit lens, even by Hispanic personnel in the school district. This experience has illustrated the effects of colonization that many members of the immigrant and Latinx community have experienced and the ideologies that they carry, such as the “mandate” to use only English in schools. Working with the school district has also motivated us to become more involved in school affairs and to return to teaching Spanish for school board members and members of the municipal board of Norristown.
Finally, our work has motivated other CCATE circles to generate their own research projects and presentations such as the environmental justice and health circles, the Artivistas (a growing art collective that creates a space for women to express their creativity, reflect on their identities and explore pressing social issues), and the new youth participatory research group at CCATE. These projects have included research collaborations with other universities and organizations on topics such as lead poisoning, the role of women in society, a health census for our community, and the administration of numerous health and vaccination clinics. In this way, our work has a circular impact that now involves the commitment and knowledge of other groups in CCATE.
Stones Along the Path: The Challenges We Face
Along this path of research for social transformation, we have faced a variety of challenges. For example, even though we meet every week for several hours, we never have sufficient time for everything we want to do and achieve. And while we recognize that what we are doing does have positive results in the moment, the deeper social transformation we hope for will not be seen until years into the future. We recognize that each one of us has different identities, roles, and positionalities that are related to our individual and collective lived experiences and very different levels of understanding and wisdom among our members about the topics we investigate and the social problems we face. While we see these differences as critical to being able to develop projects that will help make the changes we hope for, we understand that outside of our group, the labels and assumptions about who we are and what we can contribute and teach can be harmful and can prohibit certain groups from listening to and respecting us. For example, many school district administrators and staff, including Latinx personnel, struggle to view our group members as experts with knowledge to share, preferring to see us through a deficit lens. We also recognize that the issues we investigate weigh heavily on the members of our group whose daily experiences involve inequities and aggressions against migrants, and especially undocumented migrants. Because of this enormous weight, we work to take care of ourselves and each other, and move at the pace that makes sense for us.
Tilling the Soil Again: Our New Project
This year we have started a new research project using the photovoice method, a process by which people can identify, represent, and improve their community through the use of photos or images (Wang & Burris, 1997). The questions that are guiding us are the following: How can we unearth the cultural, historical, and current roots of our communities? And what have we been dispossessed of through the process of immigration? Our goal is to better understand the effects of colonialism and the dispossession experienced by Mexican and Latin American immigrants in the United States. We are currently conducting a pilot photovoice study among members of our circle exploring these questions. Based on what we learn, we hope to invite a group of CCATE community members – families, youth, and school district staff – to participate in a formal research project on this topic. We will use what we learn to develop and propose concrete legislative actions for schools and the municipality. In this way, CCATE’s participatory research circle will continue to take its work beyond the knowledge and experiences of the immediate community, to other groups, institutions, and community members. What we envision for the future is a base of knowledge produced from and by the community that will influence public policy and foster awareness and humanization of immigrant individuals and families.
References
Mora, J. & Diaz, D. R. (2004). Participatory action research: A new vision and practice in
Latino communities. In Latino social policy: A participatory research model, Introduction, 1-21. The Haworth Press.
Wang C, Burris MA. Photovoice: Concept, Methodology, and Use for Participatory Needs Assessment. Health Education & Behavior. 1997;24(3):369-387. doi:10.1177/109019819702400309
Members of CCATE Participatory Action Research
María Guadalupe Castillo – Mexican immigrant, researcher and community leader, instructor of gymnastics classes for children, member of the circles of Artivistas and CCATE health.
Horacio de la Luz – Mexican immigrant, CCATE researcher and community leader.
María Lourdes Flores – Mexican immigrant, researcher and community leader, instructor of the drawing class, member of the circles of Artivistas and CCATE health.
Salomé Flores – Mexican immigrant, researcher and community leader, member of the circles of Artivistas and CCATE health.
Diana Lugo – Mexican immigrant, researcher and community leader, CCATE environmental justice class instructor, member of the circles of Artivistas and CCATE health.
Laura Sánchez – Mexican immigrant, researcher and community leader, member of the circles of Artivistas and CCATE health.
Holly Link Ph.D. – Director of Educational Programs and Research at CCATE, and lecturer of social policy, and research at the School of Social Policy and Practice (SP2) at the University of Pennsylvania.
Obed Arango – Executive Director of CCATE and lecturer of social policy, and research at the School of Social Policy and Practice (SP2) at the University of Pennsylvania.
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