Por Leticia Roa Nixon
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Celebración comunitaria en el Barrio Chino de Filadelfia. Foto:Leticia Roa Nixon. 2025
A lo largo de 40 años como inmigrante en Filadelfia y en el condado Delaware de Pensilvania, he sido testiga de ejemplos de utopías convertidas en realidad. De acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española, la utopía es un “plan, proyecto, doctrina o sistema ideales que parecen de muy difícil realización. Representación imaginativa de una sociedad futura de características favorecedoras del bien humano.” Su opuesto es la distopía, “una representación de una sociedad imaginaria, injusta y caótica, en la que nadie querría estar.” De acuerdo con esta definición, estamos viviendo claramente una situación distópica en la actualidad con la administración presidencial liderada por oligarcas y fascistas.
Sin embargo, han sido las organizaciones comunitarias de defensa de los derechos humanos y de los inmigrantes, así como organizaciones educativas, las que han hecho que las utopías existan y que consecuentemente su membresía alcance sus sueños. Así, Juntos, en el sur de Filadelfia, ha logrado que sus integrantes sean líderes comunitarios resilientes, que Movimiento Nuevo Santuario en el norte de la ciudad reúna a treinta congregaciones interreligiosas sin distinción alguna, que el Movimiento de Inmigrantes Líderes de Pensilvania (MILPA) haya liderado por más de 15 años la lucha por licencias de conducir para residentes sin importar su estatus migratorio, que Make the Road con 10,000 miembros trabaje desde 2014 para el aumento del salario mínimo, defienda los derechos de los trabajadores y proteja a las comunidades inmigrantes en su lucha incansable para asegurar respeto y dignidad para todos.
Además, la organización cultural el Centro de Arte, Cultura, Educación y Trabajo (CCATE) en Norristown ha implementado con éxito la pedagogía del educador y filósofo brasileño Paulo Freire (1921-1997) que “se basa en la idea de que la educación debe buscar el desarrollo pleno de la libertad, la comunicación y el diálogo. Esta pedagogía propone una lectura crítica del mundo que no genere desesperanza, sino que permita ver las resistencias, las formas de salir adelante, de construcción de lo nuevo, las posibilidades permanentes que tenemos los seres humanos de reconstruir nuestra vida. Freire propuso un modelo educativo que buscaba la transformación y la inclusión de todos los individuos”.
Líderes religiosas de Movimiento Nuevo Santuario. Foto:Leticia Roa Nixon, 2025
En el barrio chino de Filadelfia, activistas y educadores fundaron la escuela autónoma “Artes Folclóricas y Tesoros Culturales” (FACTS por su acrónimo en inglés) un logro en la historia de la lucha por la igualdad y justicia para estudiantes asiático-americanos, inmigrantes y refugiados de todas las razas. A través de su misión, en la comunidad marginada del Barrio Chino, los estudiantes se convierten en participantes activos en el trabajo para una sociedad justa, respetando a las personas de edad, el arte y la cultura de la diversidad de estudiantes.
Estos son solo dos ejemplos de organizaciones educativas que, a través de su trabajo diario en comunidad, han logrado lo que muchos hubieran considerado una utopía.
El valor de la solidaridad
Lo que he notado durante la documentación a través del periodismo, de las formas de realizar los sueños comunitarios es el valor humano esencial de la solidaridad, que no sólo se manifiesta en situaciones difíciles, sino en los procesos largos de la lucha en defensa de las comunidades inmigrantes.
El liderazgo y perseverancia puertorriqueña ha abierto las puertas a los crecientes grupos latinoamericanos y caribeños que se han asentado en Pensilvania. Desde 1917 los puertorriqueños son ciudadanos estadounidenses por nacimiento; sin embargo, han sido tratados en muchas ocasiones como ciudadanos de tercera clase.
Ejemplos recientes de solidaridad
Recientemente, gracias al apoyo solidario de asiáticos, negros, blancos y latinos, la Coalición en contra de la construcción del estadio de los 76ers, el equipo local de baloncesto de Filadelfia, celebró el 2 de febrero la decisión de los dueños del equipo de construir su propio estadio con el apoyo de Comcast en el sur de la ciudad, pero festejó sobre todo la lucha solidaria de más de dos años para que dicha edificación no impactara al icónico Barrio Chino, al vecindario “Gayborhood”, al Hospital Jefferson, así como a cientos de trabajadores, residentes y comerciantes de la zona afectada por tal plan en la calle Market.
Otro ejemplo reciente de solidaridad han sido las vigilias por el descanso eterno de seis mexicanos fallecidos el 31 de enero por un trágico accidente de la avioneta médica Learjet 55 y un motorista en el noreste de Filadelfia. Encabezadas por la activista colombiana María Serna, líderes de Philly Boricuas y la comunidad puertorriqueña, con la participación del artista visual Roberto Márquez y la presencia del Consulado de México con el cónsul titular Carlos G. Obrador Garrido Cuesta y cónsul de protección Sebastián Alfonso Galván Duque Covarrubias. Se montaron 7 cruces de madera, un altar y ofrendas a los difuntos: Alan Montoya Perales, piloto; Josué de Jesús Juárez, copiloto; Dr. Raúl Meza Arredondo, médico; Rodrigo López Padilla, paramédico; Valentina Guzmán Murillo, paciente de 12 años; Lizeth Murillo Ozuna, madre y el motorista Steven Dreuitt.
Para mí la unión, solidaridad, empatía, compasión, dedicación, empeño, resiliencia y compromiso son varios de los factores que contribuyen al logro de las utopías y a que las diversas formas de soñar sean manifestadas.
Leticia Nixon
Obras seleccionadas de Leticia Nixon:
Cuando Los Tejidos Hablan (When Fabrics Speak)
Berenice, La Danzante Azteca (Berenice, The Aztec Dancer)
Huracán Corazón Del Cielo (Huracán, Heart of the Sky)
El Lienzo de Tlapalli (The Tlapalli Canvas)
Essential Human Values for Achieving Dreams
Over the course of 40 years as an immigrant in Philadelphia and Delaware County, Pennsylvania, I have witnessed examples of utopias becoming reality. According to the Royal Spanish Academy, a utopia is an “ideal plan, project, doctrine, or system that seems very difficult to achieve. It is an imaginative representation of a future society with characteristics conducive to human well-being.” Its opposite is a dystopia, “a representation of an imaginary, unjust, and chaotic society in which no one would want to be.” According to this definition, we are clearly experiencing a dystopian situation today with a presidential administration led by oligarchs and fascists.
However, it has been community-based organizations advocating for human and immigrant rights, as well as educational organizations, that have made these utopias exist and consequently enabled their members to achieve their dreams. Thus, Juntos, in South Philadelphia, has achieved the development of its members as resilient community leaders; the New Sanctuary Movement in the north of the city brings together thirty interfaith congregations without any distinction; the Movement of Immigrant Leaders of Pennsylvania (MILPA) has led the fight for driver’s licenses for residents regardless of their immigration status for more than 15 years; and Make the Road, with 10,000 members, has worked since 2014 to raise the minimum wage, defending workers’ rights and protecting immigrant communities in their tireless struggle to ensure respect and dignity for all.
Furthermore, the cultural organization the Center for Art, Culture, Education and Work (CCATE) in Norristown has successfully implemented the pedagogy of Brazilian educator and philosopher Paulo Freire (1921-1997), which “is based on the idea that education should seek the full development of freedom, communication, and dialogue. This pedagogy proposes a critical reading of the world that does not generate despair, but rather allows us to see the resistances, the ways to move forward, the construction of the new, the permanent possibilities that we human beings have to rebuild our lives. Freire proposed an educational model that sought the transformation and inclusion of all individuals”.
In Philadelphia’s Chinatown, activists and educators founded the Folk Arts and Cultural Treasures Charter School (FACTS), a milestone in the history of the struggle for equality and justice for Asian American, immigrant, and refugee students of all races. Through its mission, it fosters the students of the marginalized community of Chinatown to become active participants in working for a just society, respecting the elderly, the arts, and the culture of the diverse students.
These are just two examples of educational organizations that, through their daily community work, have achieved what many would have considered a utopia.
The Value of Solidarity
What I have noticed while documenting, through journalism, the ways in which community dreams are realized is the essential human value of solidarity, which manifests itself not only in difficult situations but in the long processes of the struggle in defense of immigrant communities.
Puerto Rican leadership and perseverance have opened the doors to the growing Latin American and Caribbean groups that have settled in Pennsylvania. Puerto Ricans have been U.S. citizens by birth since 1917, yet they have often been treated as third-class citizens.
Recent Examples of Solidarity
Recently, thanks to the solidarity of Asian, Black, white, and Latino communities, the Coalition Against the Construction of the Philadelphia 76ers Stadium, the local basketball team, celebrated on February 2 the decision by the team’s owners to build their own stadium with the support of Comcast in the south side of the city. Above all, they celebrated the solidarity struggle of more than two years to ensure that the construction would not impact the iconic Chinatown, the Gayborhood, Jefferson Hospital, as well as hundreds of workers, residents, and merchants in the area affected by the plan on Market Street.
Another recent example of solidarity has been the vigils for the eternal rest of six Mexicans who died on January 31st in the tragic accident involving a Learjet 55 medical plane and a motorcyclist in northeast Philadelphia. Led by Colombian activist María Serna, leaders of Philly Boricuas and the Puerto Rican community, with the participation of visual artist Roberto Márquez and the presence of the Mexican Consulate with Consul Carlos G. Obrador Garrido Cuesta and Consul for Protection Sebastián Alfonso Galván Duque Covarrubias. Seven wooden crosses, an altar, and offerings were set up for the deceased: Alan Montoya Perales, pilot; Josué de Jesús Juárez, co-pilot; Dr. Raúl Meza Arredondo, physician; Rodrigo López Padilla, paramedic; Valentina Guzmán Murillo, 12-year-old patient; Lizeth Murillo Ozuna, mother, and motorcyclist Steven Dreuitt.
For me, unity, solidarity, empathy, compassion, dedication, determination, resilience, and commitment are some of the factors that contribute to the achievement of utopias and the manifestation of diverse forms of dreaming.
Leticia Nixon
Selected Works by Leticia Nixon:
Cuando Los Tejidos Hablan (When Fabrics Speak)
Berenice, La Danzante Azteca (Berenice, The Aztec Dancer)
Huracán Corazón Del Cielo (Huracán, Heart of the Sky)
El Lienzo de Tlapalli (The Tlapalli Canvas)